“Éste quiso gritar, pero no pudo. Había perdido el habla. La mujer blanca se inclinaba y se inclinaba cada vez más, hasta que se tocaron los dos rostros…”. Kwaidan (1964) de Masaki Kobayashi
“Éste quiso gritar, pero no pudo. Había perdido el habla. La mujer blanca se inclinaba y se inclinaba cada vez más, hasta que se tocaron los dos rostros…”.
Kwaidan (1964) de Masaki Kobayashi.